11.11.98

Fuese aquello
repentino destello de laurel,
claras lunas protegen el horizonte
sopor cuan disipa inesperado encuentro
calma, paz, quietud.

Remolinos de aire, coloreados,
púrpura, verde, celeste
seres cuyo ruido por las noches
suplican, llaman, canturrean
el más preciado ideal:
amar…

Blandas alegrías surgen
de la cálida superficie
como el sauce; reflejos
sobre un lago en tormentas.

Uno…, dos, tres
diminutos sacos de agua
lágrimas de un ángel
sin cesar golpean
el reflejo de una sonrisa
caen…

Temerosos, el par de pequeños ojos,
asomándose quietos, sobre el muro infranqueable
voz incesante llamando
cuanta alma joven hay
corre a esconderte
sin duda, te alcanzarán…


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